BEO en Una Casa Roja.

Diciembre de 2022, domingo a la hora de la siesta, Roldán, provincia de Santa Fe. Cuarentamil grados kelvin a la sombra, sol, claridad, calor, humedad. Casi todos duermen la siesta, abrazando la almohada y el ventilador. Algunos fans del tostado, hacen lo propio derritiéndose en una reposera al sol. El silencio y la quietud sólo se alteran por el permanente chicharreo de insectos. Cada tanto: ¡splash! …algún cuerpo colisionando con un cuerpo de agua.

En el interior de este granero de chapa roja, todo lo opuesto al sopor de las quince y quince: hay ajite, personas moviendo cosas, hay ruidos y sonidos, hay conversaciones a los gritos (es que hay tres instrumentos de viento practicando en un rincón), ¡hay aire acondicionado! Hay cables que serpentean, instrumentos, micrófonos y parlantes.

Llegamos desde Rosario en dos autos, hace poco más de media hora a esta Casa Roja que nos abrió sus puertas e, inmediatamente, desatamos este pequeño caos interior en el cual, no obstante, las cosas fueron encontrando su lugar de a poco y de a una. Trajimos lo mejor: el gran Martín Greco, con pericia y tranquilidad prepara mics, conecta cosas, acomoda equipos, da indicaciones. El prestigioso cineasta Jean Luc Patulek también nos acompaña y registra todo con su cámara lúdica. Preparamos un breve pero intenso recorte de nuestro repertorio: en la semana previa sólo ensayamos bien-bien cinco canciones.

Desde hace algún tiempo sabíamos que la Banda en oRsai necesitaba de algún registro que capture cabalmente el actual sonido del grupo, el cambio de instrumentaciones y la rotación de integrantes de los últimos años. La certeza de que este interior de madera, con sus paredes revestidas con libros, nos devolvería una acústica óptima y la buena onda de nuestros anfitriones confirma nuestra decisión: hoy había que venir acá a hacer esto.

Unas cinco horas después la faena estaba concluida. Desmontado y embalado nuevamente nuestro, nos fuimos al jardín donde el sol nos daba una tregua. Ahora cantan los grillos. Nos comimos unas pizzas, bebimos unas chelas frescas y presenciamos un concierto de violín de lujo: gentileza de Vera que, a sus 7 años, ya es buenísima instrumentista. Poco después, volvimos a casa.

Hoy, marzo de 2024, con orgullo y alegría ponemos a disposición de todes el material que aquella tarde fuimos a buscar a Roldán y que en Una Casa Roja encontramos. Gracias a todos los que se comprometieron con el proyecto y gracias a ustedes por escucharlo.